Un relieve de la máscara
de la Casa de Moneda de Potosí, se destaca en lo alto.
Sombras de engranajes gigantes se proyectan en el piso. Hay piedras
y montículos de minerales de distintos colores. Se oye la
música de una banda que repite compases de la procesión
de la Virgen, en la fiesta de Corpus Christi.
Hay una exposición de fotografías, textos, mapas y
diagramas que forman una gran faja infográfica. Se destaca
la ampliación de una calle de piedras sueltas que se funden
en burbujas de plata. Dos grandes fotos del Sumaj Orcko están
expuestas juntas. Una está invertida, con su cúspide
hacia abajo, como si fuera un embudo del cual brota un texto que
da cuenta de la riqueza que surgió del Cerro de Plata.
Un asiento de primera clase de un avión de pasajeros, ofrece la
posibilidad de relajarse a escuchar, con auriculares tipo noise
cancelling,
el relato de la crónica de Potosí (en español, en la voz de su
autor Jorge Monteleone, o en inglés, en la voz de otra viajera:
Khedija Gadhoum).
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